(Sarahi Cardona)
Me quemo y estás tú.
Aunque no se me ocurre qué seas,
tienes colores, eres de colores;
pero ya no quiero verte.
No creo que tenga nada que ver con un espejo
porque no somos iguales.
Aunque me muerdas para tenerme,
no necesito hacer nada.
Ya me tengo.
Si estoy hablando bajito
es para que no te despiertes.
No quiero que sepas que me quiero ir.
Hablo por ti y para ti.
Nos enredamos
y ahora estamos en un laberinto;
pero mis manos flotan,
y no estoy tan cerca del suelo.
No quiero que me encuentres,
voy a esconderme en el viento.
Y es que ahora que te veo,
siento que me ahogas.
No puedo escuchar la vida
porque tu jadeo ocupa toda la habitación.
Ahora entendí qué me pasa cuando me tocas.
Eres ácido y yo me disuelvo en ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario